Alejandro Magno

imagen de la película Alejandro Magno

Alejandro y Bucéfalo, su caballo, nacieron prácticamente en el mismo año y murieron los dos en la treintena de edad. Bucéfalo significa “cabeza de buey” y a lomos de él; Alejandro conquistó un imperio que abarcaba desde Grecia hasta la India, pasando por Egipto donde fundó Alejandría que fue la capital del imperio.

Bucéfalo tenía la frente ancha, perfil cóncavo, que denotaba su ascendencia oriental. Su pelo era negro con un lucero blanco en la frente. Su alzada era mayor que la de sus contemporáneos. Se dice que tenía un ojo azul. Su temperamento era arisco y difícil. Plutarco cuenta en sus crónicas que Alejandro domó a Bucéfalo con solo nueve años y en ese momento su padre, el rey Filipo le dijo: "Hijo, búscate un reino que se iguale a tu grandeza, porque Macedonia es pequeña para ti”. A partir de entonces, Bucéfalo sólo se dejó montar por su amo. Murió a consecuencia de las heridas sufridas en una batalla en la India contra el rey Porus, cerca del río Hidaspes. Alejandro lo enterró con honores militares y en el lugar fundo, en su honor, la ciudad de Bucefalia. Una parte de Alejandro Magno murió en el Hidaspés y muy poco tiempo Alejandro habría de acompañar a su compañero en el otro mundo.

Faro de Alejandría

Sabemos por las crónicas dónde se enterró Bucéfalo, también sabemos que Alejandro Magno murió en Babilonia, pero lo que no sabemos a ciencia cierta es dónde está su tumba, aunque se sabe que estuvo en Alejandría y fue visitada por personajes como Julio César y el emperador Augusto. Luego fue destruido su mausoleo y aún hoy se sigue buscando su localización, aunque hay indicios que apuntan al subsuelo de El Cairo o al templo de Amón de Siwa.

Cuenta la leyenda que en Anatolia estaba la ciudad de Gordión, capital de Frigia donde existía un yugo atado por un nudo complicadísimo, el Nudo Gordiano, y que según los oráculos el que consiguiera desatarlo dominaría Asia. Alejandro, tras intentarlo y no conseguirlo, desenvainó su espada y lo cortó de un poderoso tajo.

Este yugo perteneció a Gordión, campesino pobre que sólo poseía una yunta de bueyes con los que araba las tierras. Este campesino conseguía atar sus yuntas con un nudo imposible de deshacer. Un día un águila se posó sobre el yugo y este hecho fue el augurio de que llegaría a ser rey. Fue padre del rey Midas y estos hechos sucedieron cuatrocientos años antes del nacimiento de Alejandro Magno.

El lema personal de Fernando el Católico “Tanto monta”, hace alusión a este nudo: lo mismo es cortarlo que desatarlo.