Esta máxima deberían aplicárselas todos aquellos que trabajan en Educación en España pues, es este colectivo, el que tiene que sufrir y aplicar, dichos cambios junto con el alumnado que empieza con un currículum educativo y acaba con otro.
Cada vez que un partido político gana unas elecciones generales, parece que se ven impulsados a cambiar el Sistema Educativo del país, como si esto fuera el psitoletazo de salida de una nueva etapa de cambios generales, pero yo me pregunto, ¿con quién consultan para elaborar estos cambios?. Creo que con los trabajadores de la enseñanza, con las personas que diariamente están en primera fila, no.
Estas sucesivas reformas no llevan a reducir el fracaso escolar, a la vista está, pues en el último informe PISA, seguimos estando por debajo de la media de los países de nuestro entorno, luego, ¿estos cambios son para afianzar las posiciones partidistas? o ¿están realmentes pensados para elevar el nivel educativo de los jóvenes españoles?, yo pienso que lo primero.
Y adenás, aquellos que sobreviven en el sistema educativo y consiguen terminar estudios universitarios, raramente consiguen un adecuado puesto laboral y tiene que emigrar para poder desarrollar su profesión o tienen que conformarse con un empleo para el que no necesitan tanta formación o, lo que es peor, apuntarse y engrosar las listas del paro.
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